domingo, 15 de noviembre de 2009

Oh blog, disculpa querido blog!

domingo, 15 de noviembre de 2009

¡Oh mi querido blog!

De plano ahora sí te dejé muy descuidado amigo, me imagino que sentiste mucho frío, ansiedad y tristeza el no saber nada de mí en por casi un mes. Me siento mal porque al principio de todo esto (hace ya casi un año) te prometí escribir al menos una vez a la semana. ¿Pero quién soy yo para que me creas? La verdad es que calculo que cumplo una de cada 100 promesas que hago… así que, es tu decisión si decides abandonarme…

Bueno y pues, estimado lector, desorientado y aburrido cibernauta que por X razón (léase ‘equis’ y no ‘décima’) ha caído aquí, déjeme decirle que, como siempre ha sido en este espacio, no encontrará información fidedigna o valorativa, científica o alguna otra que valga la pena almacenar en su cabezota.

Estoy aquí en este mi blog para confesarle algunas cosas que me ocurrieron en el presente mes próximo a caducar, ya que ni la propia Moskografía sabe que pedo con mi vida!!!

Blog mío y querido, vengo a desembocar toda mi ira y coraje porque el hijo de %&%&/( del vocalista de una de las tres bandas donde estoy (ah por cierto, ya tengo tres bandas blog :D) nos dijo el viernes apenas que había amarrado una tocada en “Atizapán” y que era para una causa noble: recaudación de fondos para el tratamiento de Hemodiálisis (saber que rayos es eso, dale clic aquí). Ok, de mala pero mala gana acepté ir a tocar y eso que ese sábado pensaba pasarlo con mi familia en el cine y luego en un café. Cuando me dijeron que había dinero de por medio lo pensé un poco más pero aún así llegué a las 10:30pm al lugar de encuentro del grupo y me encuentro conque ¡hay ensayo todavía! Bueno total que salimos a las 12:00am ya del sábado rumbo a la susodicha fiesta de caridad.

Y ahí íbamos la Zona Kingston (no estaría mal que checaras el Facebook de la banda, el link está en el lateral derecho de este blog) en tres carros hechos la madre en Periférico para tratar de llegar a tocar todavía. Pasamos el centro de Atizapán y suspiré aliviado ‘por fin llegamos’. Pues pasamos un puente vehicular, luego otro puente, luego una desviación hacia Morelia (sí, Morelia, Michoacán). Luego decía Villas del Carbón a 34 kilómetros, luego a 25 kilómetros, luego a 10 kilómetros…

Total que tampoco llegamos a Villas del Carbón, pero si a un pueblo raro y mal pedo llamado San Pedro o creo que ya era Nicolás Romero o algo así. Ya para acabarla de amolar, otros veinte minutos en lo que encontrábamos la casa en donde era la fiesta. Y ya nos estacionamos y toda la gente aplaudiendo cuando llegamos, por lo que dedujimos ‘pinche bandita ya andan hasta el huevo’. Y sí, casi al instante (con regueton a todo volume de por medio) me jala una niña de unos 18 o 19 años y me sienta en una silla. Traía una pequeña mini puti skirt que apenas le cubría ahí donde te conté (jajaja, no soy más explícito pero ya saben a que me refiero). Nada mal la chava pero sí muy borracha y después de mí siguieron otros dos amigos de la banda, por lo que hasta llegué a pensar que si no era stripper o cosa parecida, jaja.

Pasando los buenos momentos anteriores pasamos a colocar las cosas y taráaaaaaaaannnn: no hay batería ni bocinas, ni ecualizador, ni amplificador ni cosa que se le asemejase. Solo estaban las bocinas y la mezcladora del sonidero pero no nos quiso prestar nada. Así que bien buena onda la chava de la fiesta nos dice: ahorita en 5 minutos les traen todo lo que necesiten. Saber si lo fueron a conseguir, o lo tenían guardado y lo fueron a sacar o de plano fueron a atracar un RadioShack o una Veerkamp, pero después de como hora y media nos trajeron todo (que ya de por sí era muy tarde y nosotros bien lejos). Mientras yo platicando con dos tres bandita y unas grupis que se acercaban a preguntar algo a la banda. Y la esa niña nos estaba sacando uno por uno a bailar salsas y duranguenses y todo lo que sonara en las bocinotas (saludos, saludos, saludos a la gente de Iztapalapa y Nezayork =P) y la señora de la fiesta sirviéndonos quesadillas, ponche (ah como adoro el ponche), agua, café, refresco e incluso cerveza (yo me limité a mi ponche y una queca de flor de huitlacoche).

Llegó el equipo y la mayoría de la gente seguía en el lugar así que nos animamos a tocar. Quien conoce de audio sabe que no es fácil instalar bocinas, consolas, amplificadores, cablear todo, hacer puentes, ecualizar instrumentos y cosas de esas, así que nos tardamos casi una hora haciendo y deshaciendo hasta que por fin quedó. Tocamos como una hora y en eso la bandita se empezó a ir (decían que porque ya era tarde, a mí se me hace que porque tocamos muy aburrido, jaja). Nos bajamos de tocar, nos pagaron la mierda de 100 pesos, o sea, para 8 miembros de la banda nos tocaba de a $12.50, pero mejor decidimos ponerle gas a los coches (me tocó la doblemente mierda de $40.00 y considerando que yo era el que iba más lejos de regreso). Nos volvimos a perder para encontrar el camino de regreso y sólo había borrachos mala copa en la calle a quienes preguntamos para guiar nuestro destino. Ya por fin (y ahora sí) en Atizapán, cuando vamos bien chingones los tres carros juntitos y a moderada velocidad pues que nos para una patrulla estatal y a perder otra media hora que porque ¡¡¡el carro del vocalista no tenía los papeles en regla!!!

Y ya por fin entrando a Periferico de nuevo (¡wow! me tocó ver cómo trabajaba el proletariado en las obras del Viaducto Bicentenario) que se para de nuevo el vocal que porque su Vochito ya no daba una más. Bueno, una hora más de talacha y así, todavía tuve que pasar a dejar a gente a su casa y cosas por el estilo, rumbo a mi casa ya se veía la gente de saco y obreros que se van a trabajar desde tempranito. Llegué a mi camita previa mega caguiza por parte de mi papá y puse mi despertador porque hoy iba a ensayar temprano con un grupo llamado La Zezna. Me despertaría entonces a las 8am, y ¿qué creen? Ya eran las 6…

Bueno, hoy fui a ensayar temprano y a tocar por la tarde en un evento que estuvo más que chafa, mal organizado y pagado como todos a los que voy y, para variar, me puse nervioso como típico novato y se me engarrotaron los dedos, así que en pocas palabras: toqué bien culero y les eché a perder el tokín. Pero me dijeron que no hay pedo, que se comprende por el poco tiempo que llevamos ensayando. Ja! Mi consuelo llega el próximo viernes para el cual debo estar al 100 con ellos. Ahí les dejo el flyer, ya me voy a dormir.

malditacchnago

Salud y saludos!

0 recordatorios maternos, deja el tuyo:

 
Moskografía ◄Design by Pocket, BlogBulk Blogger Templates